Mientras en Europa y gran parte del mundo los partidos de liga se han suspendido por las vacaciones de fin de año, la Liga Premier sigue avanzando, inmutable e imbatible en una dura pelea por los primeros puestos de la competencia. Ahora el liderato lo comparten los equipos de Mancester, el United y el City aunque este último tiene dos partidos más que el primero. Al acecho está el Arsenal que hoy visita al Wigan y buscará no perder terreno.
Entretanto, en Italia, la polémica sobre la salida de Rafael Benítez del Inter de Milán sigue viva y ayer, en una entrevista que publica el diario italiano La Stampa, el presidente del Inter, Massimo Moratti, toma al toro por los cuernos y habla sobre el pasado reciente y el futuro del campeón del Mundial de Clubes.
A una pregunta directa sobre si le ha pesado la sombra de Mourinho a Benítez, el mandamás nerazzurro comentó: "sí, a él (Benítez) diría que mucho. Se veía que la sentía. Hablaba de ello a menudo, quizá también para justificarse". "No (creo que esto vaya a ocurrir de nuevo con Leonardo). Creo que esta fase se ha cerrado con Benítez. Leonardo tiene tal personalidad que no se verá influido por el recuerdo del técnico portugués", añadió.
Según Moratti, siempre demostró su apoyo en público para Benítez, incluso cuando los resultados no fueron tan buenos y a pesar de que el entrenador español haya dicho lo contrario en sus ahora famosas declaraciones a pie de cancha una vez obtenido el título de l Mundial de Clubes en los Emiratos Árabes Unidos, las cuales fueron agriamente criticadas y muy probablemente resultaron la gota que derramó el vaso en la relación club - técnico.
El presidente del Inter ha asegurado que la elección de Leonardo "es para asentar el futuro, no para superar una transición complicada. Apuesto decididamente por él", según publica El País de España. Y es que Leonardo dirigió la temporada pasada al Milán, su vecino y eterno rival, llevándolo al tercer lugar de la Serie A italiana y a octavos de final de la Liga de Campeones de Europa en la que, dicho sea de paso, fue vapuleado por el ManU.
Es tal la relación entre ambos equipos milaneses que según La Gazzetta, Moratti telefoneó a su homólogo del Milán, Adriano Galliani para comunicarle la contratación de Leonardo, en lo que llamaron "una conversación cordial".
Por su parte, Benítez se enteró de la "recisión consensuada del contrato" estando en Liverpool de vacaciones en lo que fue toda una crónica de una muerte anunciada ya que el español no guardaba buenas relaciones con muchos integrantes del Inter y le cuestionaban su incapacidad para crear un buen ambiente de trabajo como lo había hecho su antecesor, Mourinho.
En el interior del Club hay cierto alivio ya que nadie le perdonaba a Benítez el haberse saltado los códigos éticos y lavar la ropa sucia fuera de casa y que esto se hiciera de mala forma y en un momento que a todas luces era inadecuado tal y como lo externó Moratti en su momento. Un mes atrás, Moratti había comentado que sabía lo que era despedir a un técnico a mitad de temporada y que 10 años antes no lo hubiera dudado pero en la actualidad era algo que había que pensar mucho y que no quería hacerlo. Era obvio que ante los resultados y el juego mostrado por su equipo, la continuidad del técnico estaba siendo analizada, pero lamentablemente la actitud beligerante de Benítez terminó por cavar su tumba y despejó cualquier duda tanto del presidente como de cualquiera de los asesores y de la gente ligada al club para que la decisión de la recisión del contrato se diera tal y como se dio.
Le toca a hora a Leonardo dirigir a un equipo al que se acostumbró a odiar por años y que conoce bastante bien. Es turno de la afición del Inter para reaccionar ante los movimientos señalados y de los jugadores para soltar un poco la presión que se estaba formando entre ellos y el cuerpo técnico y que representaba una pesada losa que tiene al club lejos de los primeros lugares del Calcio.
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