La Máquina Celeste
de Cruz Azul despertó en el momento más oportuno y humilló a las Águilas del
América con un contundente 4 goles a 0 en el Estadio Azul que les permite
meterse de lleno a la pelea por los puestos de Liguilla.
Ambos equipos
saltaron al terreno de juego con hambre de gol y muy pronto quedó demostrado.
Los cementeros dieron el primer aviso pero el América tampoco se quedó atrás y
buscó el dominio del balón presionando fuerte a los cruzazulinos desde su
salida.
El equilibrio se
rompió con un poderoso y relampagueante contragolpe orquestado por Pablo
Barrera quien tomó el balón por la banda derecha y se escapó para servir un
magnífico pase a Formica quien, de primera, tocó el esférico para la llegada de
Mariano Pavone quien no dudó en mandar un poderoso fogonazo que se incrustó en
la portería defendida por Moisés Muñoz para el 1-0 al 16'. Sin duda, una jugada
magistral entre los tres atacantes celestes.
El América buscó el
empate y adelantó filas pero la defensiva local se plantó bien y cerró
adecuadamente los espacios ocasionando la desesperación de Mohamed que decidió
recomponer el esquema y sacó a Osmar Mares, que había arrancado el encuentro en
la lateral izquierda, para meter a Luis Gabriel Rey, buscando que Oribe tuviera
compañía al frente pero el veterano atacante simplemente no pesó en el
encuentro. El ajuste obligó a Miguel Layún a dejar la media derecha para
ubicarse en la lateral izquierda, con lo que las Águilas perdieron aún más peso
ofensivo y, en el ir y venir de Layún, dejaron espacios libres para los
peligrosos contragolpes celestes.
Al 84', Joao Rojas
escapó por la banda derecha y mandó un peligroso centro que Mariano Pavone
perseguía junto con Goltz y luego de un choque ocasionado por el delantero
cementero que, de esta forma, permitió que el balón se pasara de largo y dio
oportunidad a la llegada de atrás de Chaco Giménez quien, solo, empujó el
esférico al fondo de la red aprovechando la mala salida de Moisés Muñoz que se
encontraba fuera de su arco. La Máquina ya ganaba 2-0.
El América intentó
reaccionar pero Cruz Azul se mostró firme y solvente en la defensa y jamás dejó
de atacar a los azulcremas que fueron cayendo cada vez más hondo en la
desesperación y esto fue bien aprovechado por la Máquina.
Cuando ya todo
parecía haber terminado y corría el 90', se dio una jugada a balón parado que
parecía no tener nada pero que fue magníficamente aprovechada por los
cementeros para el 3-0 que caía como balde de agua fría en las filas
americanistas. Chaco Giménez tocó para Mariano Pavone quien mandó un pase
perfecto para la llegada de Gerardo Flores quien entró al área y fusiló a
Moisés Muñoz.
El Cruz Azul,
crecido, todavía se dio el lujo de una dolorosa estocada final. Un pase largo
fue controlado por Chaco Giménez a tres cuartos de cancha y de espaldas a la
portería y este habilitó a Joao Rojas quien entró como tromba y dejó atrás a su
marcador para enfilarse hacia la portería del América y mandar de nueva cuenta
el balón hacia el fondo para dejar el marcador en un contundente y escandaloso
4-0 a favor de la Máquina Celeste.
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