Sin duda ha sido la
noche de Giorgio Chiellini quien anotó los tres goles del cotejo. Los italianos
dominaron el encuentro desde el arranque y pusieron a trabajar al arquero
visitante desde temprano pero la buena actuación de este impidió que los
azzurri abrieran el marcador hasta el 44', gracias a una jugada a balón parado
en la que Pirlo mandó un centro magnífico para que Chiellini cabeceara
aprovechando una mala salida del arquero de Azerbaiyán, Agayev, para poner el
marcador 1-0 en Palermo.
Italia mantuvo la
actitud ofensiva pero Agayev tuvo buenas intervenciones y los delanteros
italianos también desperdiciaron buenas oportunidades, tal vez la más clara fue
la de Zaza quien solo y con la puerta abierta mandó el balón hacia afuera
estando dentro del área chica. En el 76', Chiellini introdujo el balón en su
propia meta al intentar impedir que Aliyev rematara cuando el esférico que
había sido centrado en un tiro de esquina, se paseaba dentro del área chica
italiana.
Los azzurri se
lanzaron de nueva cuenta al ataque y en el 82', en un tiro de esquina ejecutado
por Giovinco, quien entó al terreno de juego al 77' en sustitución de Florenzi,
la defensa de Azerbaiyán rechazó pero el propio Giovinco se hizo del balón de nueva
cuenta estando al borde del área y mandó un nuevo centro que, en esta ocasión,
sí encontró a Chiellini quien, de cabeza, mandó el esférico al fondo de la
portería visitante para el 2-1 que volvía a poner a Italia a la delantera.
Lejos de
conformarse, los italianos volvieron a la carga y estuvieron a punto de ampliar
el marcador gracias a un potente disparo desde fuera del área de Giovinco pero
el fogonazo se estrelló en el larguero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario