Islandia 2-0 Holanda

Islandia ha dado una gran sorpresa al derrotar a Holanda por 2 tantos contra 0 en Estadio Laugardalsvöllur de Reikiavik. Un resultado que deja a los holandeses en una situación muy comprometida ya que llevan 2 derrotas en 3 partidos en este trepidante inicio de las eliminatorias rumbo a la Eurocopa 2016.

Holanda no se las ha visto todas consigo desde aquel 3er lugar en Brasil 2014. Comenzó las eliminatorias con una derrota ante la República Checa, por 2 goles contra 1, luego venció a Kazajistán 3-1 y ahora que todo parecía indicar que recompondría el camino, ha tropezado estruendosamente ante Islandia que, con esta victoria, suma ahora 9 puntos con un +8 de diferencia de goles que lo sitúan en el 1er puesto del Grupo A, empatado en puntos con República Checa pero estos con una diferencia de goles de +4. Holanda es 3o con 3 unidades, Letonia es 4o con 2, Kazajistán 5o con 1 y Turquía es 6o también con 1 unidad.

Tras la derrota, un apesadumbrado Gus Hiddink comentó que "hay que examinar cuidadosamente lo que hemos hecho para mejorar". Cabe mencionar que Islandia jamás había logrado vencer a los Países Bajos en su historia y este triunfo les permite soñar con la Eurocopa.

El 1er tanto cayó al 10' por la vía de la pena máxima. En una jugada que no parecía llevar gran cosa, en la disputa por el balón, Bikir Bjarnson fue derribado por Gregory Van der Wiel y el árbitro marcó la pena máxima pese a las airadas protestas de los holandeses que, ahora sí, no creían que fuera penal. El propio Bjarnson se encargó de convertirlo en gol.

La estrategia de aguantar atrás y contragolpear planteada por Lars Lagerbäck, director técnico de Islandia, había rendido frutos y sería puesta a prueba de nueva cuenta ya que los visitantes cargaron con todo en busca del empate.

La Naranja Mecánica tomó el control del partido pero no supo traducirlo en jugadas de peligro y sus avances se diluían en pases laterales que terminaron siendo intrascendentes ante la falta de profundidad mostrada. El muro defensivo islandés pasaba las pruebas una tras otra y los locales iban tomando confianza para contraatacar.

En un tiro de esquina cuando ya corría el 42', se dio una serie de rebotes en el área holandesa y el balón cayó a los pies de Gylfi Sigurdsson quien mandó un potente fogonazo desde dentro del área que se coló entre un mar de gente para introducirse en el fondo de la portería visitante y poner el marcador 2-0 ante la incredulidad de los holandeses.

Holanda siguió insistiendo en la segunda parte pero Islandia creaba mucho mayor peligro a la contra que los visitantes con su dominio que a fin de cuentas resultó estéril ya que el marcador no se movió más.