El Málaga logró el
pase a la siguiente ronda de la Copa del Rey de España pese a caer por 3 goles
contra 2 ante el Levante que, tras caer por 2 a 0 en la ida y con los muchos
problemas en la Liga, presentó un cuadro plagado de suplentes y parecía aceptar
su derrota como dulce cordero hasta la entrada de David Barral al 61', que
revolucionó a su equipo al darle otra dimensión, anotar dos goles y asistir
para otro, dándole así la vuelta al marcador y recetándole una buena dosis de
sufrimiento al Málaga que terminó pidiendo la hora al árbitro.
La remontada le
permitió al Levante lavarse la cara ante los cerca de 6 mil aficionados que se
dieron cita en el Ciutat de Valencia para apoyar a su equipo. El Málaga comenzó
el partido muy cómodo con un ritmo semilento y sin correr riesgos controló el partido
desde el inicio.
Corría el 22' cuando
la media cancha del Málaga recuperó un despeje de la defensiva del Levante y en
dos toques el balón llegó a Ricardo Horta quien avanzó por la izquierda y en
lugar de cruzar su disparo como mandan los cánones, aprovechó que el portero
había descubierto su poste para mandar un tiro raso que se incrustó en la
portería local para el 0-1.
El Málaga mantuvo el
control del partido y, sin despeinarse, acrecentó su ventaja al 38', gracias a
otro robo de balón en la media cancha. Esta vez fue por la derecha por donde
encontraron el hueco y avanzaron pero la defensa local logró rechazar aunque para
su mala fortuna el balón fue prendido en los linderos del área por Recio quien
llegaba a toda velocidad y mandó un potente disparo que dejó sin oportunidad a
Jesús para el 0-2 que sentenciaba la eliminatoria.
La segunda parte
comenzó muy floja, con un Levante alicaído y un Málaga confiado pero todo
comenzó a cambiar tras la entrada de Barral, quien le dio un giro a su equipo y
aprovechó que al 65', el técnico andaluz sacó a Angeleri para ingresar a
Filipenko en la defensa central. El bielorruso, flamante nueva contratación del
Málaga, se vio lento, desubicado y fuera de forma, lo cual fue perfectamente
aprovechado por un Barral con hambre de gol.
Barral aprovechó la
falta de coordinación de la defensa visitante que intentó dejarlo en fuera de
juego para anotar el 1-2 al 71' y despertar de esa forma a la escasa
concurrencia. Al 74', tomó un balón en el área, giró, dejando parada a la
defensa, y mandó el balón al fondo de la red para el 2-2 en una gran jugada
personal y, para redondear su actuación, en el 85' cabeceó hacia 2o palo en un
tiro de esquina para habilitar a Juanfran quien anotó el 3-2 que le daba la
vuelta al partido.
El Levante se fue
con todo al frente en busca del milagro pero en la desesperación de anotar el
4o tanto, Barral metió la mano y esto le costó la 2a amonestación y, por ende,
la expulsión del terreno de juego, con lo que las aspiraciones de sus compañeros
murieron al abandonar el partido.
Guillermo Ochoa no
tuvo gran cosa que hacer en la primera hora del partido en la que el Málaga fue
claramente superior y tampoco tuvo responsabilidad en las anotaciones del
Levante y sí tuvo una magnífica intervención ante un gran disparo de Barral que
pintaba para el 3o del Levante.
Así las cosas y pese
a los sobresaltos, el Málaga avanza a cuartos de final en la Copa del Rey de
España al derrotar por un marcador global de 4 goles contra 3 al Levante.
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