Cuando todo indicaba
que se le daría descanso a gente clave, Luis Enrique prefirió no meterse en
líos y alineó a su tridente, Messi, Neymar y Suárez, que, sin despeinarse
mucho, hizo trizas a un Getafe que, simplemente, fue arrollado.
El conjunto
blaugrana comenzó el partido a tambor batiente y sin miramientos. Se adueñó del
balón y en una de las primeras aproximaciones al área del Getafe, Álvaro Arroyo
tumbó a Luis Suárez que se enfilaba con balón controlado hacia la portería
defendida por Vicente Guaita y el árbitro no dudó en marcar la pena máxima que
Messi convirtió, a la Panenka, para el 1-0. Era todavía el 9' y la avalancha se
le avecinaba al Getafe.
Barcelona aflojó el
paso y comenzó a hacer jugadas de carambola, en algunas ocasiones, con sobrada
confianza que le hicieron perder balones y, con espacios abiertos, el Getafe
esbozó algunos intentos por nivelar el marcador pero Claudio Bravo dejó todo aquello
en intento con buenas intervenciones, dando tiempo a que su equipo finiquitara
el partido.
Dani Alves tomó el
balón por el costado derecho y avanzó sin presión hasta tres cuartos de cancha,
pasó a Messi y éste, con calma y sin desesperarse, mandó un pase flotado para
Suárez quien, de primera, puso el balón en el ángulo de la portería de Guaita
para el 2-0 al 25'. Se comenzaban a escuchar los tambores de goleada y el
Getafe simplemente bajó los brazos.
Suárez robó un balón
en los linderos del área, pasó a Neymar quien primero se deshizo de un defensa
con un quiebre hacia adentro y luego disparó hacia el primer poste en medio de
tres defensas que intentaban cerrarle el paso para anotar el 3-0 al 28'.
Sin darle tiempo
para reaccionar al Getafe, Xavi mandó un disparo desde fuera del área para el
4-0 al 30' y Luis Suárez puso el 5-0 al 40' con un disparo justo al entrar al
área en una jugada que había nacido en los botines de Messi en el lado derecho
y que fue culminada por la izquierda.
Por si faltaba algo,
Messi puso el 6-0 definitivo en cuanto arrancó el segundo tiempo, noqueando al
Getafe. Luis Enrique optó por darle descanso a Xavi al 59' y a Dani Alves al
68' pero ni así perdió el control del partido el Barcelona que ya no quiso ensañarse
más y le bajó a las revoluciones. El daño ya estaba hecho y la fiesta en el
Camp Nou era imparable. El trío Messi-Neymar-Suárez volvió a dejar patente su
poderío.
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