Powered By Blogger

jueves, 6 de enero de 2011

En Europa, la batalla se enfurece

En la Liga Premier, el Manchester City, con dos partidos de más sobre el ManU y uno extra sobre el Arsenal, había terminado el fin de semana empatado con sus vecinos y, ante la victoria de hace un par de días de estos, estaba obligado a ganar ayer pero tenía enfrente nada más y nada menos que al Arsenal en lo que se antojaba como un choque de trenes.

El encuentro comenzó como se esperaba, con el Arsenal cargando con todo lo que tiene y apenas a los 8 minutos ya Van Persie había estrellado un balón en el poste y el Manchester City requirió de varios minutos más para comenzar a enfriar el partido y nivelarlo. Cuando corría el minuto 30, Cesc Fábregas estrelló otro balón en el poste y en la misma jugada su compañero Walcott también la rebotó en el palo, aunque el árbitro marcó un fuera de lugar. Los pupilos de Wegner tenían en claro que había que sacar provecho de la localía y merecieron más pero no supieron horadar la meta contraria y entre la buena fortuna y los palos, el partido quedó empatado a ceros.

Ayer comentamos sobre las declaraciones de Ancelotti en las que afirmaba sentirse afortunado por no haber sido despedido aún y ayer mismo le puso más presión a la olla ya que el Chelsea perdió al visitar al Wolverhampton 1-0, quien aprovechó la ocasión para salir del sótano de la Liga Premier, al menos de manera momentánea. El tanto fue producto de un autogol y cayó desde el minuto 5 del partido, por lo que el Chelsea tuvo tiempo suficiente para reaccionar pero parece que su gente está peleada con el gol y llevan ya 6 partidos consecutivos sin conocer la victoria como visitantes.

El Blackburn le pasó encima al Liverpool 3-1 que no ha visto una en esta temporada y anda perdido ya en la parte baja de la tabla en lo que es clara muestra de la severa crisis por la que atraviesa y que pone a su técnico, Roy Hodgson, también en capilla. Por su parte, el Everton logró una importante victoria 2-1 sobre el Tottenham, el Newcastle barrió de fea forma 5-0 al West Ham, el Bolton empató1-1 con el Wigan y el Suderland hizo lo propio con el Aston Villa.

En San Mamés, el Barcelona logró sobrevivir a "la Catedral" como le llaman al campo, al empatar 1-1 con el Athletic en los octavos de final de la Copa del Rey y, con gran sufrimiento ha logrado avanzar. Guardiola ha reconocido que "en la Catedral no ves el momento de que acabe el partido" y Caparrós dijo "habría sido tremendo eliminar al mejor equipo del mundo", en clara muestra de lo que resultó el partido que terminó con un Barcelona defendiéndose como gato boca arriba y pidiendo al árbitro la finalización del encuentro, lo cual, a decir de Fernando Llorente, "dice mucho". Nadie puede decirse contento después de ser eliminado en un torneo, pero hay que reconocer que el Athletic ha caído con la cara al sol y que hizo tambalearse al Barcelona que terminó rogando y agradecido por haber librado la aduana.

El lleno que había sido garantizado desde días antes y el ambiente en el estadio eran dignos de tomarse en cuenta. San Mamés hizo su parte: con un clima cálido y una leve llovizna la gente se volcó para apoyar a su equipo y los 40 mil aficionados no dudaron en hacer su partido. Si bien Pep Guardiola siempre ha buscado el espectáculo, su equipo jugó ayer consciente de que tenía que romperle el ritmo a sus rivales si quería sobrevivir en la Copa del Rey y se dedicó a tocar el balón para hacer correr a sus rivales que amontonaron a mucha gente en la defensa e hicieron el gasto físico correteando el balón e impidieron que los de Barcelona pudieran crear ocasiones claras de gol. La lucha se centró en el medio campo y la producción ofensiva fue escasa.

Abidal puso adelante a los azulgranas pero en el final, Llorente metió de nuevo al Athletic en la pelea y al Barcelona en el calor de la batalla para unos últimos minutos de pesadilla, con una batalla enfurecida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario