Brasil logró
imponerse por 2 goles contra 1 a Colombia en el Estadio Castelao de Fortaleza
para clasificar a la semifinal de la Copa del Mundo Brasil 2014.
Brasil se plantó en
el terreno de juego de mejor forma que Colombia y arrancó el partido
presionando a los visitantes y nulificando su media cancha por lo que controló
las acciones y se vio mucho mejor en la primera parte. Para su buena fortuna,
en un tiro de esquina ejecutado al 7' por Neymar, Thiago Silva logró empujar el
balón con la rodilla para el 1-0 que caía como un balde de agua fría para
Colombia.
Un duchazo de
realidad a un equipo que había desplegado un futbol muy atractivo y que soñaba
con romper esa hegemonía que ejerce sobre ellos Brasil en tierras brasileñas,
de donde los cafetaleros jamás han podido salir con una victoria y apenas
habían podido rescatar 3 empates por 6 derrotas en visitas anteriores.
Si bien Colombia
intentó sublevarse, fue Brasil el que dominó las acciones en la primera parte.
Los locales se vieron muy superiores y parecía que ampliarían la ventaja en
cualquier momento. Comenzaron por fin a aparecer las triangulaciones y los
toques y quiebres que siempre les han caracterizado y que tanto gustan a su
afición pero Colombia resistió y logró irse al descanso con el marcador 1-0.
Para la segunda
parte, Colombia mejoró mucho en su accionar y poco a poco fue tomando el
control del partido ya que Brasil les fue cediendo la iniciativa y prefirió
concentrarse en la defensa para hilvanar rápidos contragolpes en busca de
finiquitar el encuentro.
Neymar por fin dejó
que David Luiz cobrara un tiro libre al 69', el central puso el balón pegado al
poste izquierdo de Ospina, arquero colombiano, y este no midió adecuadamente y
se lanzó sin dar ningún paso para acercarse por lo que no llegó a tiempo y el
balón se introdujo en su portería para un bonito gol que ponía el encuentro 2-0
y parecía finiquitar el duelo.
Brasil volvió a
echarse atrás en busca de otro contragolpe mientras Colombia buscaba acercarse
con más ganas que orden y todo parecía indicar que ya no habría más emoción
pero cuando corría el 76', Julio César trompicó a Carlos Bacca dentro del área
y el árbitro no dudó en marcarle penal que, al 80', James Rodríguez convirtió
en gol.
El tanto fue como
una bofetada para el anfitrión y sin duda impulsó a Colombia que no dudó en
lanzarse con todo al frente en busca del empate. Brasil intentó romper el juego
pero parecía asfixiarse con la presión ejercida por los colombianos que
lucharon con denuedo pero no pudieron empatar el partido y Brasil terminó, con
buena dosis de sufrimiento en los minutos finales, agenciándose el encuentro
por 2 goles contra 1, con lo que clasificó a semifinales de la Copa del Mundo
Brasil 2014 haciendo buenos los pronósticos de los expertos.
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