Ecos de una tragedia

Sin duda alguna, la goliza que propinó ayer Alemania a Brasil en el Estadio Mineirao ha sido histórica. Jamás Brasil había perdido un partido en una Copa del Mundo con un marcador tan escandaloso y esto era impensable en su propia casa. De hecho, ningún equipo había recibido una goleada de 7 tantos contra 1 en semifinales en la historia de los mundiales y esto lo hace aún más duro de digerir.

Alrededor del mundo, los periódicos y medios de comunicación han hecho eco de lo sucedido y han publicado grandes titulares. En España, MARCA tituló: "El Mineirazo supera al Maracanazo" y "Humilhacao Mundial. AS titula: "Masacre Mundial". En Argentina, OLÉ publica: "Brasil Decime Qué Se Siente".

Los propios brasileños son duros y Mundo Deportivo expone el titular "Humillación", SPORT titula "FRACASAZO, humillación histórica a Brasil" y en grande se puede leer el marcador 1-7.

En Italia, la Gazzetta dello Sport expone: "Histórico, Alemania vence 7-1 a Brasil que es toda tristeza" y el Corriere dello Sport incluye un enorme 7 en su portada con la palabra humillante adentro. En Francia, L'Equipe escribió: "Humillación histórica".

Sin duda, el mundo ha quedado en estado de shock ante lo sucedido ya que ambos equipos llegaron al presente mundial con etiqueta de favoritos para ganarlo y estaban en la parte más alta para los apostadores y expertos internacionales y si bien a últimas fechas y dada la lesión de Neymar Jr. la parte alemana había cobrado más fuerza y era ligeramente favorito para llevarse el duelo, nadie pudo imaginar una goleada de esta magnitud.

Luiz Felipe Scolari, quién ha asumido toda la culpa, es un estratega conocedor y muy preparado que es famoso por su pragmatismo y que construyó este equipo basándose en la solidez defensiva y nadie esperaba que fuera precisamente la defensa brasileña la que causara esta debacle.

Para la FIFA, el jugador más valioso de Brasil hasta antes de esta catastrófica semifinal había sido David Luiz quien, con lágrimas en los ojos, dio sentidas declaraciones al finalizar el encuentro. Para Brasil se ha caído el sueño y se derrumbó de la manera más triste posible. Los titulares de muchos diarios brasileños incluyen la palabra "Vexame" que significa "Vergüenza" y es como muy probablemente se recordará la pesadilla vivida ayer en Mineirao.