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martes, 26 de julio de 2011

Celebrando

Uruguay ha festejado en grande la hazaña conseguida por su equipo y no es para más, el 15o título los sitúa de nuevo entre los grandes del continente y del mundo. Después del cuarto lugar obtenido en Sudáfrica, mucha gente esperaba que el buen paso se mantuviera y la Federación Uruguaya hizo un esfuerzo para cumplir las peticiones de Washington Tabárez y mantenerlo en el banquillo.

Uruguay ha ratificado su excelente forma, dejando en claro que el cuarto lugar del pasado Mundial de Sudáfrica no fue ninguna casualidad y mostrándose como una selección madura, comprometida y bien dirigida en pos de un objetivo común.

Para Tabárez, el orden, el sacrificio individual en función de objetivos colectivos y la disciplina táctica son fundamentales. Uruguay no es un equipo anodino sin figuras, pero sus figuras han sabido anteponer el equipo a sus propios intereses, así, Diego Forlán brilló en el Mundial y fue considerado el mejor jugador del torneo y Luis Suárez ha hecho lo propio en la Copa América para también ser considerado el mejor del torneo y ambos se han felicitado mutuamente y se han apoyado en todo momento.

EL PAÍS de España titula: "¡Uruguay nomá!" y hace alución al logro tan importante para un país que geográficamente es pequeño, mismo título utilizado por EL PAÍS de Uruguay que "también recuerda la consagración de la celeste como el equipo más laureado de la competición: Es el rey de reyes".

EL OBSERVADOR de Montevideo recuerda la hazaña alcanzada por Forlán, que levantó la corona continental como ya hicieron su abuelo Juan Carlos Corazo como entrenador (1959 y 1967) y su padre, Pablo, como jugador (1967). Los periódicos argentinos también rinden tributo al buen trabajo de Tabárez y sus pupilos y, de paso, arremeten contra Batista que por fin fue destituido del timón albiceleste. EL CLARÍN titula "La revancha del Maestro" y comenta que "las últimas experiencias de Tabárez en Argentina, con Vpelez y Boca, no habían estado a la altura de su historia. El título en la Copa América lo reinstaló como un DT de élite". LA RAZÓN lo dice con simpleza pero de manera muy clara: "Uruguay, rey de América".

La tabla oficial de la competición quedó con Uruguay como campeón y México como 12o y último lugar. La continuidad, el esfuerzo colectivo y la disciplina de un equipo contrastando con la falta de seriedad, indisciplina e individualismo del otro. Unos celebrando justamente mientras otros simplemente escondiéndose.

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