Jorge Vergara
siempre se ha distinguido del resto de los directivos del futbol mexicano por
su estilo propio para trascender. Lamentablemente para las Chivas Rayadas de
Guadalajara su estilo poco tiene que ver con el futbol en sí y más bien se
centra en los medios. A Vergara le gusta ser el centro de atención y le gusta
lanzar periodicasos.
Al dueño de Chivas
le gustan las cosas en grande. En su momento convocó a un Consejo Consultivo
con figuras para que asesoraran deportivamente al Club. Supuestamente el
Consejo se reuniría periódicamente para analizar todos los aspectos deportivos
desde el primer equipo hasta fueras básicas pero el Consejo terminó por
renunciar ya que jamás se reunieron para analizar aspecto alguno y los miembros
terminaron por entender que eran puras figuras decorativas.
Al anuncio con bombo
y platillo jamás le siguió trabajo alguno y el Club jamás oficializó la
disolución de dicho Consejo. Los grandes anuncios de Chivas en la era Vergara
han sido más bien llamaradas de petate. Se gritan proyectos a los cuatro
vientos y luego se diluyen al poco tiempo sin llegar a nada en concreto.
Llegó el momento de
anunciar entonces a Johan Cruyff para encabezar una transformación desde la
raíz del Club Deportivo. El estratega holandés y su equipo de colaboradores se
harían cargo de todo lo deportivo del Club, desde fuerzas básicas hasta el primer
equipo en un trabajo que se dijo que sería a largo plazo pero que después de un
corto período también se vio interrumpido y Vergara echó mano de su gente para
sacar a los holandeses y retomar las riendas del equipo.
Ahora Chivas ya está
en la parte baja de la tabla de cocientes y al final del torneo anterior se
hizo mucha bulla al contratar a Ricardo La Volpe para transformar al equipo
desde la raíz y volcarse hacia los jóvenes para nutrir de nueva cuenta al
primer equipo con una camada nueva que sea capaz de devolverle la gloria pero
dado que el técnico sudamericano no fue capaz de meterlos a la Liguilla en 4
partidos también se le dio las gracias aunque claro, hay que mencionar que
según Vergara no fue por aspectos deportivos sino más bien por "conducta
impropia".
El Rebaño Sagrado
está en una situación muy comprometida y necesita refuerzos urgentemente. Ya
han contratado a un técnico nuevo, Bustos, que trabajó bien en Morelia pero fue
hecho a un lado de Monarcas a mediados del Clausura 2014. El nuevo técnico se apresuró
a declarar que las puertas estaban abiertas para Luis Michel quien tuvo que
jugar en Costa Rica la temporada anterior debido a la falta de interés de las
propias Chivas y el presidente del Club no se quedó atrás y declaró que incluso
el Bofo Bautista tendría las puertas abiertas si logran cerrar una negociación
con la MLS con la que, por cierto, tienen serios problemas que resolver.
La primera gran
contratación del chiverío es Carlos Salcido quien ya tiene experiencia
mundialista e incluso ha sido convocado para Brasil 2014 por Miguel Herrera y
seguramente aportará experiencia a la defensiva del Guadalajara pero ya tiene
los días contados en la Primera División y sus mejores tiempos han quedado
atrás sin duda alguna.
Fiel a su estilo,
Vergara grita a los cuatro vientos que esta vez sí reforzará con lo mejor a las
Chivas y que la reestructuración deportiva va en serio pero termina haciendo lo
que le da la gana para imponer su voluntad y sus contrataciones pocas veces obedecen
a un plan estructurado y más bien buscan llamar la atención de los medios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario