Angustioso pase

El Peñarol ha vuelto a una gran final y ¡de qué forma! Ha logrado superar en semifinales al que, para muchos, es el mejor equipo argentino en la actualidad, el Vélez Sarfield. Ha logrado la hazaña gracias a su gol de visitante ya que en el partido de ida había ganado 1-0 y ahora, en Argentina, perdió 2-1. Vélez falló un penal al minuto 75 que les hubiera dado el pase.

Nadie puede olvidar los logros históricos de este Peñarol que, de hecho, fue el primer campeón del torneo, en 1960 y llega a su décima final para encontrarse con otro histórico de la Competencia, el Santos de Brasil que también brilló enormemente en los inicios del certamen a tal grado que, según apunta MEDIO TIEMPO, estos dos "equipos se repartieron las 4 primeras ediciones de la Libertadores". Peñarol fue campeón en 60 y 61 mientras que el Santos se coronó en los dos años siguientes.

El Santos había eliminado al Cerro Porteño en un duelo muy disputado que terminó con un marcador global de 4-3 a favor de los brasileños que también tienen su historia en la Libertadores.

El partido de ayer fue muy intenso. Si bien Peñarol se defendió bien atrás y mostró oficio, jamás renunció al ataque y puso en constantes predicamentos a los defensas argentinos que no podían sumarse al ataque sin pensar en las posibles represalias de los uruguayos, pero tenían que correr los riesgos si querían pasar a la gran final. Ambos equipos mostraron oficio y buena aplicación en la defensa con el Vélez buscando ofender y teniendo más tiempo la pelota pero muy atento de los contraataques del Peñarol que mostró velocidad y peligrosidad en todo momento. Hubo jugadas en ambas áreas y en todo momento se vio un equilibrio entre ambos equipos.

AS titula de manera contundente: "Peñarol rompe al mejor equipo argentino y es finalista". La última vez que el Peñarol se coronó en este torneo fue en 1987 y que mejor que disputarlo ahora contra un viejo conocido que también busca reverdecer laureles, el Santos de Brasil.

Gran triunfo. ¿Sufrido?  No hay duda, pero tampoco cabe ni la menor duda de que este equipo mostró la firmeza y el oficio necesarios para merecer estar en donde está, la gran final de la Copa Libertadores y enfrentar al Santos de Brasil.