La Copa América

Ya casi está todo listo para que de inicio la disputa por una nueva Copa América. Es el torneo más antiguo y se juega desde julio de 1916. En el partido inaugural de aquel torneo, Uruguay goleó a Chile 4-0 y, desde aquel momento, no ha estado libre de disputas, protestas y situaciones fuera de lo común. Esta será la octava edición con equipos invitados y el único invitado que ha asistido a las 7 anteriores y estará presente en esta es México que desde 1993 se ha presentado siempre de manera digna.

México llegó a la gran final de Ecuador en el 93 y perdió ante Argentina dejando muy buena impresión. En el 95, en Uruguay, cayó en cuartos de final ante Estados Unidos, en penales. En el 97 cayeron en semifinales con Bolivia con enorme polémica (en México porque por esos lugares no hicieron mucho caso a las protestas tricolores) y finalizó en tercer lugar. En Paraguay 99, repitió como tercer lugar del torneo. En Colombia 2001 terminó en segundo lugar al caer en la final con el equipo anfitrión. En Perú 2004 cayeron ante Brasil en cuartos de final y en Venezuela 2007 terminó en tercer lugar, atrás de Brasil y Argentina.

Cuando llegó por primera vez la invitación para que México participara en el torneo, muchos analistas que se jactan de grandes conocedores vaticinaron derrotas inimaginables para el tricolor. Mucha gente pensaba que no teníamos nada que hacer en dicho certamen y que sólo serviría para evidenciar el bajo nivel de México en futbol. Se habló de la mediocridad del torneo local, del protagonismo de los extranjeros en nuestra liga, etcétera, etcétera.

La realidad ha sido otra. México ha estado en buen nivel de competencia y siempre ha destacado como un atractivo para la Copa América no sólo deportiva sino también económicamente hablando. La afición sudamericana gusta de ver al equipo tricolor en acción y acuden en masa al estadio cuando juegan. Para sorpresa de muchos, México ha plantado cara y ha aportado su sabor, picardía y color al torneo.

Si bien en esta ocasión Jack Warner y CONCACAF le exigieron utilizar un equipo alterno y se pudieron escuchar algunas voces que hablaban de no invitarlos para esta edición, al final reinó la cordura y México participará con una selección alterna, sub-22 con algunos refuerzos de más edad. No es la primera ocasión en la que se presenta con una selección alterna, ya lo hizo en Bolivia en 1997 cuando finalizó en tercer lugar después de haber sido eliminado en semifinales por los bolivianos en un partido plagado de irregularidades que incluyeron la polémica expulsión del entrenador tricolor.

En esta ocasión de nuevo hay dos invitados. Originalmente habían invitado a Japón pero este envió una carta disculpándose por no poder asistir debido a los problemas existentes en su territorio. Ante esto, se hicieron varios intentos para que cambien de parecer y asistan e incluso el presidente de FIFA, Joseph Blatter intentó persuadirlos pero aparentemente nada fue suficiente y será Costa Rica quien los supla. La Volpe tiene una oportunidad de reivindicación después del desastroso papel de su equipo en la Copa Oro.

Argentina alberga el certamen después de 24 años de no hacerlo y está dispuesta a todo para quedarse con la Copa. México jugará la fase de grupos ante Chile, Perú y Uruguay. Los favoritos para llevarse el título son, sin duda, los argentinos, locales y urgidos por alguna distinción de relevancia, los brasileños, eternos favoritos donde se presenten y los uruguayos que hicieron un más que decoroso papel en el Mundial Sudáfrica 2010. México buscará un papel decoroso y fogueo para su equipo, pero una vez en el campo, todo depende de los jugadores y hasta donde estén dispuestos a pelear por sus sueños.