Los Rayados del Monterrey han sido protagonistas en muchos de los últimos torneos disputados en México. Tienen grandes estrellas, un muy buen funcionamiento colectivo y nadie discute de la capacidad y conocimientos de su entrenador, Víctor Manuel Vucetich. ¿Por qué fracasó en el actual Mundial de Clubes?
Analizando sus últimos torneos podemos notar que si bien aparece hoy en el segundo lugar de la tabla porcentual que promedia la actuación de los equipos en los últimos 3 años, terminó el último torneo en el 11er sitio y, como bien dijo su técnico, "cayó en una zona de confort".
La tabla porcentual para el Clausura 2012 la encabeza el Cruz Azul con 1.7882, producto de 152 puntos en 85 partidos disputados. A este le siguen los Rayados del Monterrey con 1.7412 producto de 148 puntos en 85 partidos. Sin embargo, al revisar la tabla general del Apertura 2011 vemos que los Rayados cayeron hasta el sitio 11, con apenas 1.4118 de porcentaje producto de 24 puntos en 17 partidos. A esta baja de productividad es a la que se refería Vucetich cuando habló de la "zona de confort" y es que el porcentaje obtenido en este torneo para el Monterrey es el más bajo de los últimos años.
De cualquier forma, el equipo se había caracterizado por sacar los duelos importantes. Había sido capaz de dar sus mejores partidos en los momentos claves y esto le había permitido, por citar un ejemplo, llegar al mundial de clubes. Supo eliminar al Cruz Azul aprovechando que este quiso proteger una ventaja mínima encerrándose en su propia área por demasiado tiempo. Supo obtener las victorias importantes en los momentos críticos para ir salvando etapas y agenciarse el pase.
¿Qué sucedió? Albert Einstein pronunció en algún momento de su vida una frase muy interesante: si quieres obtener resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo. Esto es perfectamente aplicable al "caso mexicano" y su pobre desempeño en el Mundial de Clubes.
Para variar, el equipo mexicano que llegó al Mundial de Clubes en Japón, llegó después de hacer pretemporada y sin haber practicado futbol en el último mes. De nuevo, los responsables técnicos del equipo representativo del futbol nacional dieron prioridad a la preparación físico atlética de los jugadores y dejaron de un lado lo futbolístico.
El Monterrey tenía los ojos puestos en el Mundial de Clubes y no se preocupó cuando quedó eliminado de la Liguilla. De inmediato dieron una breves vacaciones y comenzaron a preparar una intensa pretemporada que incluyó de todo, menos partidos de futbol. Al igual que el Pachuca con el profesor Meza al frente, no fueron capaces de desplegar su mejor futbol a la hora buena.
Por citar un ejemplo, el Barcelona llega a la cita bien encarrilado, en pleno funcionamiento y habiendo disputado a su mejor nivel partidos de Liga y Champions en las últimas semanas, tal vez estén cansados físicamente, pero tienen mucho mejor nivel porque simple y sencillamente, no han parado de jugar futbol.
Ya hemos visto fracasar a varias ediciones de muy buenos equipos mexicanos que llegan a la cita después de pretemporadas extenuantes y con muy poco futbol de por medio. De alguna forma, los equipos que ganan su boleto al Mundial de Clubes se olvidan del campeonato local y terminan fuera de la Liguilla muy pronto o de plano no se clasifican a ella. De alguna manera, alguien les ha dicho que la forma física es lo más importante y se olvidan de preparar el aspecto futbolístico. En alguna ocasión, el Pachuca se vio incluso lento y desarticulado en su primer partido del torneo y para muchos críticos era obvio que les había faltado disputar más partidos de preparación antes del Mundial.
Lamentablemente, el Monterrey volvió a apostar por lo mismo y obtuvo el mismo resultado. ¿Algún día cambiarán? ¿Alguien priorizará en algún momento el futbol en lugar de la montaña?
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