El Real
Madrid se ha agenciado su décimo primera orejona. Todo un hito en el futbol
europeo sin duda alguna. Conforme van pasando los días, van surgiendo algunos
detalles sobre cómo preparó cada equipo y cada técnico la gran final y, por
supuesto, las grandes diferencias van surgiendo.
Diego
Simeone no quería perder ningún detalle y preparó todo con anticipación, el
Atlético entrenó fuerte en las últimas dos semanas, viajó con dos días de
anticipación a Milán, fue a reconocer el Estadio de San Siro y entrenó ahí
mostrando fortaleza, decisión y, sobre todo ganas de hacer historia y
conquistar su primera UEFA Champions League. Simeone no dudó en practicar los
penales y siguió una serie de cábalas con la finalidad de sentirse cómodo.
Por el
otro lado, Zinedine Zidane lo vio de una forma más relajada. Cuidó los detalles
de la preparación del equipo pero evitó intimidar, prefiriendo dar confianza a
sus jugadores y enfocando las pláticas en otra dirección. El Real Madrid no
ensayó los penales en las semanas previas a la gran final.
Sergio
Ramos fue hacia Gabi y el árbitro con la intención de pedir tirar primero pero
el volado lo ganó el Atlético y, sorpresivamente, Gabi solicitó tirar segundo y
para colmo de males para los colchoneros, se acordó tirar en la portería donde
estaba la porra del Real Madrid. Según las estadísticas, el equipo que tira
primero gana el 60% de las series de penales y los números son todavía más
favorables cuando el primer tirador acierta. El Atlético tenía fresca la serie
de penaltis ante el PSV Eindhoven y en ella los rojiblancos habían ganado
tirando en segundo lugar.
Usualmente,
se coloca a los mejores tiradores primero para dar confianza al grupo pero
Zizou volvió a sorprender cuando preguntó al grupo quién se animaba y colocó a
Lucas Vázquez, un suplente, después de que este se ofreciera inmediatamente.
Según publica El País, un jugador merengue dijo que "algunos no podíamos
ni caminar, otros no querían mirar y Lucas fue con gusto a tirar el penal como
un niño en un partido amistoso". El gol de Lucas animó al grupo.
Había
sido obvio que al final del partido el Atlético terminó mejor físicamente y a
eso hay que agregar que Simeone se reservó dos cambios para la prórroga
mientras que muchos jugadores del Real Madrid ya se mostraban visiblemente
cansados y los calambres comenzaron a aparecer en más de uno de los jugadores
merengues. Adicionalmente a eso, los colchoneros habían conquistado el empate
en la recta final del partido y habían puesto a los merengues en serios
predicamentos, por lo que parecía que la suerte podría sonreírles, pero no fue
así y el Real Madrid terminó alzándose con la copa.
El
segundo penal lo tiró Marcelo y el tercero Gareth Bale, quien no parecía haber
terminado en buena forma el partido pero aun así pidió tirar y Zizou le dio el
gusto y la confianza. Ambos anotaron. La prensa indica que el propio médico del
Real Madrid se sorprendió al ver a Bale enfilarse al área para tirar la pena
máxima y dijo "¿A dónde va si está cojo?".
Por el
Atlético, Griezmann no defraudó y anotó de buena forma. El francés lo hizo de
la misma forma como tiró ante el PSV pero a partir de ahí, los siguientes
tiradores cambiaron y comenzaron a tirar para el lado contrario a como lo
habían hecho ante el PSV.
Keylor
había visto videos de la serie entre el Atlético y el PSV y sabía lo que estaba
sucediendo pero según publican en la prensa española, "sintió que era
demasiado tarde para cambiar y le apostó al poste derecho siguiendo el guion
que habían llevado los colchoneros ante el PSV". El arquero costarricense
se lanzó a su derecha, para el mismo lado al que fue el disparo de Juanfran,
pero no alcanzó a intervenir ya que el tiro se estrelló en la base del poste.
El hombre que había gestado la jugada del gol del Atlético al desbordar y
mandar un centro desde la banda derecha había fallado un penal que podía ser
decisivo. Era el primer hierro de los disparadores del Atlético.
En el
último lugar de la lista de tiradores del Real Madrid aparecía Cristiano
Ronaldo. El ariete madridista se había visto muy disminuido en la recta final
del partido. Había puesto todo de sí en ir y venir una y otra vez para ayudar a
su equipo pero al final del encuentro no se veía nada bien e incluso le había
confesado a sus compañeros que "estaba muerto".
Llegó la
hora de la verdad y Cristiano, que ya sabía lo que es fallar una pena máxima en
serie de penales en la UEFA Champions League, lo hizo de buena forma y anotó el
gol decisivo que garantizaba la obtención de la copa.
Trascendió
a la prensa española que Zidane nunca completó la lista y no había sexto
tirador por lo que de extenderse la tanda de penales los jugadores merengues
hubieran tenido que ponerse de acuerdo en ese momento para ver quien se lanzaba
para disparar el siguiente.
Días
antes del partido, no habían dudas sobre la continuidad de Simeone y el futuro
de Zidane era incierto. Para el Atlético, el Cholo ha hecho resurgir al equipo
y lo ha catapultado de nueva cuenta hacia lo más grande de España y Europa. Hay
una comunión genuina entre el entrenador pampero, sus jugadores, los directivos
y la afición colchonera. Sin embargo, en la rueda de prensa posterior al duelo,
con el dolor de la derrota a cuestas y al parecer todavía muy caliente, el
Cholo hizo una declaración ambigua en la que daba a entender que su continuidad
podría estar en juego, algo que aficionados, directivos y sobre todo jugadores,
esperan que haya sido una simple calentura y que no pase a más.
Por el
otro lado, habían incluso rumores que ya ponían a Zizou fuera de la dirección
técnica del Real Madrid desde hace meses, cuando nadie imaginaba que los
merengues avanzarían mucho más en la Champions y que por ningún motivo podrían
acercarse al Barcelona en la Liga. Sin embargo, Zidane jamás perdió la calma y
poco a poco, el trabajo fuerte fue rindiendo frutos, los merengues lograron una
sorpresiva victoria sobre el Barcelona en la Liga y los hicieron tambalearse de
fea forma, logrando acercarse a un punto mientras mantenían su avance en la
Champions. Ahora, con el título en manos no será tan fácil correrlo.