Los Pumas de la UNAM
rompieron su mala racha ante el América al derrotarlos por 3 goles contra 1 en
el Estadio Azteca.
Las Águilas
comenzaron a cavar su propia tumba desde el principio y nunca dejaron de
hacerlo. Si bien los equipos llegaban al partido con puntuación muy pareja, sus
realidades eran muy distintas y los errores americanistas han dejado por
sentado que la situación no ha tocado fondo aún.
El América había
acostumbrado a su afición en la época de Miguel Herrera a planteamientos
agresivos. Cuando el Piojo llegó al timón, el equipo ya no era capaz de asustar
a nadie en su propia casa y fue una de las tareas más complicadas para el ahora
timonel nacional: convertir el Azteca en un fortín. Ayer, de nueva cuenta, el
América salió con timidez en un partido importante y Pumas se dio cuenta de
inmediato por lo que se lanzó con todo al frente, presionando al equipo local y
buscando asfixiarlo desde la salida.
Sambueza cometió el
primer error grave del partido al perder un balón en la salida del América y
Bravo no dudó en habilitar a Ludueña quien agradeció el regalito convirtiendo
el primer gol. Era el 1-0 para Pumas. Un gol sorpresivo en el que el talento y oportunismo
de Bravo y Ludueña fueron claves para aprovechar un exceso de confianza de
Sambueza.
El América logró
empatar el partido mediante una jugada a balón parado al 27'. Sambueza centró,
Luis Gabriel Rey la bajó con la cabeza y Raúl Alonzo Jiménez la mandó al fondo
de la portería para el 1-1.
Las Águilas se
asentaron mejor después del gol y comenzaron a presionar a Pumas en su propia
puerta, obligando a los Universitarios a redoblar esfuerzos para defenderse
mejor y tratar de salir en contragolpes. Los americanistas pusieron a trabajar
entonces a Pikolín quien sin duda fue un factor determinante para mantener el
partido empatado. Raúl Jiménez fue el delantero más peligroso del América y si
bien creó buenas ocasiones de peligro, falló a la hora buena y el América no
supo aprovechar el momento y dejó vivir a Pumas.
Cuando el América
vivía sus mejores momentos sobrevino un segundo error grave que volvió a
desnivelar el partido. Francisco Maza Rodríguez salió expulsado al 51' por un
golpe a Marco Palacios en el área Universitaria en un tiro de esquina. De
cualquier forma, las Águilas mantuvieron el control del partido y continuaron
presionando al equipo visitante y generando acciones de peligro aunque sin
llegar a acosar a Pumas.
Cuando corría el
68', Daniel Ludueña volvió a hacerse presente al cobrar de gran forma un tiro
libre y anotar el 1-2 que devolvía la ventaja a Pumas y obligaba al América a
lanzarse con más decisión al frente. Los azulcremas adelantaron filas y
buscaron el ansiado gol del empate pero este se les negó tanto por buenas
atajadas de Pikolín como por pifias en el último toque y, para colmo de males,
Juan Carlos Valenzuela perdió un balón de forma absurda ante Daniel Ramírez
quien de inmediato bombeó el balón aprovechando que Moisés Muñoz estaba fuera
de su arco para anotar el 1-3 al 83'.
Así las cosas, Pumas
logró su 4o triunfo del Clausura 2014 para llegar a 14 puntos y tomar por
asalto el 3er puesto de la tabla general.
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