El Barcelona
conquistó un importantísimo triunfo en el juego de ida de los octavos de final
en el City of Manchester al derrotar al Manchester City por 2 goles contra 0.
Los Citizens
formaron una barrera muy bien ordenada alrededor de su área y defendieron con
ahínco su portería, imposibilitando al Barcelona para crear acciones de peligro
en el inicio del partido. El conjunto azulgrana tuvo el balón el 61% del tiempo
pero le faltó profundidad y sufrió para inquietar a Joe Hart durante la primera
mitad. Incluso el City se vio más peligroso al contragolpe y puso en aprietos a
Valdez en más de una ocasión al presionar con fuerza y desdoblarse con rapidez
sobre su marco cada vez que tenía el balón.
Messi no había
logrado aparecer y cuando menos se lo esperaba el Ctiy, un gran pase filtrado
para el argentino fue el punto de quiebre del partido ya que DeMichelis lo
trabó justo afuera del área pero el árbitro lo marcó como penal y expulsó al
defensa local. El propio Messi se encargó de convertir la pena máxima en gol
para el 0-1 al 54' con un disparo suave y al centro de la portería defendida
por Hart.
A partir de ahí, el
Barcelona monopolizó el balón y se lanzó al frente con la intensión de
capitalizar su ventaja numérica pero los Citizens supieron aguantar a pie firme
y mantuvieron el orden, respondiendo con esporádicos pero peligrosos
contragolpes.
La puntilla llegó al
90' gracias a una incursión de Dani Alves quien avanzó unos metros y cedió el
balón a Neymar por el extremo derecho y el brasileño retrasó el esférico para
la entrada de Alves quien mandó un disparo raso que pasó entre las piernas de
Hart para el 0-2 definitivo.
La mesa queda puesta
para que el Barcelona culmine el pase en el Camp Nou en la vuelta de estos
octavos de final ya que la ventaja parece clara y dadas las circunstancias,
seguramente el conjunto Blaugrana podrá soñar con los cuartos de final de la
UEFA Champions League.
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