El Barcelona
conquistó un empate en Anoeta para avanzar a la gran final de la Copa en España
gracias al resultado obtenido en la ida ante la Real Sociedad.
La Real Sociedad
intentó meterse al partido desde temprano y organizó algunos ataques que,
aunque algo tímidos, hicieron que el conjunto blaugrana se replegara por
momentos pero cuando corría el 27' un grave error defensivo ocasionó la
debacle. En un despeje sin nada, José Ángel paró mal el balón y lamentablemente
para su causa, habilitó nada más y nada menos que a Lionel Messi quien tomó el
esférico y lo condujo en medio de tres defensas para sacar un tiro que si bien
era controlable, terminó por escurrírsele a Zubikarai para el 0-1 que ponía
contra las cuerdas a la Real Sociedad.
Con la eliminatoria
prácticamente definida, el Barcelona se adueñó de la situación y comenzó a
pasear a la Real Sociedad con un abrumador 74% de posesión del esférico. El
Barcelona fue tomando confianza y reencontrándose en Anoeta al ritmo dictado
por Xavi, Iniesta y Fábregas quienes se encargaron de adormilar a los
mediocampistas locales y les obligaron a correr siempre detrás del esférico.
La Real Sociedad
apostó entonces a los espacios abiertos en busca de meterse al encuentro con un
contragolpe pero fue hasta el 87' cuando un largo pase desde el medio campo
encontró a Chory Castro en el extremo izquierdo y este mandó un pase retrasado
para la llegada de Griezmann quien remató de excelente forma para vencer a
Pinto y firmar el 1-1 que le permitía a
la Real Sociedad salvar el honor en su propio campo.
Así las cosas, la
mesa ha quedado puesta para la gran final entre el Barcelona y el Real Madrid
que probablemente se jugará en Mestalla.
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