Cruz Azul y Jaguares
de Chiapas comenzaron el duelo ante lo que parecía ser una bonita tarde y
terminaron firmando el empate a 1 en una completa piscina.
El partido comenzó
movido, con dos equipos que buscaban ir al frente aunque fueron los Cementeros
los que dominaron en la primera parte y dieron mejores pinceladas de futbol.
Chiapas estaba bien parado atrás pero jamás renunció al ataque y supo poner a trabajar
a Jesús Corona.
Si bien Chiapas
generó la primera aproximación de gol en el partido, muy pronto Cruz Azul tomó
el control del esférico y comenzó a mandar obligando a los visitantes a
parapetarse con muchas unidades atrás y a salir en desdoblamientos. Cuando
corría el '38, una bonita jugada por la derecha de Joao Rojas quien fue
quitándose defensores chiapanecos con habilidad y mandó un centro que fue
cortado por Félix Araujo con la mano y el árbitro no dudó en marcar la pena
máxima que lamentablemente para la Máquina, no supo aprovechar Pablo Barrera
quien estrelló el disparo en el poste derecho de la portería de Jaguares.
Chiapas respondió
casi de inmediato y también estrelló un balón en la portería cementera como
para dejar en claro que no estaban dispuestos a entregar el partido.
Para el segundo
tiempo, la lluvia hizo su aparición y lo que comenzó siendo una pertinaz
llovizna, poco a poco se fue convirtiendo en un aguacero y ambos equipos
comenzaron a sufrir para adaptarse a las cambiantes condiciones del terreno de
juego. Cuando corría el '71, Avilés Hurtado mandó un fuerte fogonazo que si
bien iba esquinado, parecía que Corona hubiera podido hacer más pero el balón
terminó anidándose en su portería para el 0-1 que ponía adelante a Chiapas.
La respuesta
cementera fue casi inmediata y apenas un minuto después, Mariano Pavone
aprovechó un error defensivo para tomar un balón y desde fuera del área
aprovechar que el arquero visitante estaba adelantado y en movimiento y lanzar
un fuerte disparo que lo dejó sin oportunidad para el 1-1.
Cuando más emociones
brindaba el partido, tuvo que ser suspendido por el granizo y fue reanudado más
de 15 minutos después cuando aún el terreno de juego no parecía estar en buenas
condiciones y ambos equipos terminaron jugando en una verdadera piscina y
luchando para acarrear el balón. Aún así, Cruz Azul tuvo una jugada de gol que
fue erróneamente anulada por el árbitro y Chiapas anotó uno que entró de
campanita pero tampoco lo apreciaron así los jueces y el marcador ya no se
movió para un emocionante 1-1.