Si bien un sinfín de
analistas van de un extremo a otro y hablan del "fin de una era" con
respecto a la derrota española ante Brasil en la final de la Copa FIFA
Confederaciones Brasil 2013, la realidad es que España sigue siendo una de las
favoritas para el Mundial Brasil 2014 y que mas que lamentarse o rasgarse las
vestiduras, es hora de un análisis profundo para encarar lo que viene.
No cabe ni la menor
duda de que la fatiga pesó en muchos de los jugadores que llegaron al torneo
con demasiados partidos encima y, en el caso de los pertenecientes al Barcelona
y Real Madrid, con cierres tremendamente exigentes y desgastantes.
El estilo propio que
ha desarrollado cada vez es más conocido y Felipao no dudó en aplicar la
presión que tan bien le funcionó en su momento al Bayern de Múnich al enfrentar
al Barcelona. Los muchos toques de balón de España carecieron en los partidos
finales de la profundidad requerida para hacerle daño a equipos bien plantados
como Italia y Brasil que supieron aguantar y minimizar las ocasiones de gol
ibéricas.
Así mismo, la
defensa que se vio displicente en la primera ronda, pasó serios apuros ante
Italia y se vino abajo ante Brasil en el partido decisivo. El lateral derecho
de España sigue siendo un dolor de cabeza y vaya que lo supo explotar Neymar
quien seguramente será soñado por Arbeloa por un buen rato.
Hizo falta gente
importante que por diversas razones no pudo llegar al torneo. Tal es el caso de
Xavi Alonso quien está fuera por lesión y fue extrañado por sus compañeros en
la cintura de la Selección. Iniesta sigue siendo el motor del equipo pero en esta
ocasión Xavi Hernández no pesó tanto y su desenvolvimiento fue más discreto.
Si bien España, al
igual que el Barcelona, se ha acostumbrado a jugar con un falso centro
delantero, la falta de contundencia arriba se va convirtiendo cada vez más en
un problema y Pedro por más que lo intenta no logra terminar de cuajar en la
ofensiva. Se hizo un intento con Mata y si bien este creó una enorme
oportunidad en el primer tiempo ante Brasil, se perdió la mayor parte del
encuentro y terminó siendo substituido. Navas dio grandes pinceladas pero
parece que del Bosque lo considera únicamente como relevo y no como titular del
puesto.
Sin duda también
tiene mucho que ver la postura tomada por Brasil que no dejó jugar a España y
se plantó con agresividad y atrevimiento tales que provocaron muchas fallas en
la salida del equipo ibérico y, por supuesto, es innegable que la permisividad
del árbitro influyó.
El cuerpo técnico
español tendrá mucha tela de donde cortar para levantar al equipo de una
derrota importante y buscar de nueva cuenta la Copa del Mundo. La generación
tiene la mentalidad y el potencial para lograrlo y la dirección técnica ha dado
claras muestras de objetividad y determinación para encausarlo.
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