En un excelente
partido, el mejor de los últimos años, los Tigres del Universitario de Nuevo
León lograron imponerse por 3 goles contra 1 a los Rayados de Monterrey en el
Volcán que por fin rugió en un Clásico del Norte.
A diferencia de
otros años, en esta ocasión ambos equipos saltaron al terreno de juego con un
planteamiento más ofensivo y buscaron hacer daño en la portería rival, jugando
a un gran ritmo y con mucha intensidad. Un largo centro desde la banda derecha
de Tigres al segundo poste encontró a Alan Pulido quien cabeceó para anotar el
1-0 cuando apenas corría el '11.
La Pandilla
respondió y adelantó filas, presionando a Tigres desde su salida y gestionando
mejor sus variantes ofensivas y generando opciones de gol. Primero fue Zavala
quien al '19 se quedó corto y se perdió el empate pero luego, al '23, en una
bonita triangulación, los Rayados emparejaron las acciones. Silva mató con el
pecho para Suazo quien habilitó a Pabón y este regresó al Chupete para que
mandara el balón al fondo de la red pese al esfuerzo de Palos que poco pudo
hacer.
Tigres y Rayados se
enfrascaron entonces en un ir y venir en busca de un gol y cada avance felino
encontraba una respuesta rayada. Pero cuando corría el '40, los universitarios
lograron su cometido. Damián Álvarez cobró un tiro de esquina por la banda izquierda
y el balón se le pasó a todo el mundo hasta llegar a los pies de Alan Pulido
que había perdonado en una jugada anterior y en esta ocasión no dudó en mandar
el esférico al fondo de la portería de Jonathan Orozco para el 2-1.
Tigres no bajó el
ritmo en la segunda parte y mantuvo la presión sobre Monterrey que parecía
resignado a ceder el protagonismo a los locales y buscar rápidas respuestas en
sus contragolpes. Ambos equipos generaron opciones pero fueron los Tigres lo
que más cerca estuvieron del gol hasta que, en los minutos finales, una gran
jugada definió el intenso partido.
Damián Ávarez
habilitó a Lobos por la banda derecha y este se quitó a tres defensas al darse
la media vuelta y mandó un disparo raso pegado al poste para el 3-1.
Monterrey intentó
responder y ahora Tigres era el que mandaba los contragolpes en un muy
disputado encuentro. Lamentablemente para los Rayados, una expulsión exagerada
en una jugada que no llevaba nada y en la que el defensivo universitario
únicamente protegía el balón para que saliera por la banda, Bernardo Hernández
fue expulsado y, de paso, Vucetich también por reclamar y los ánimos se
caldearon en el Volcán.
Así las cosas, en
uno de los mejores Clásicos de los últimos años, los Tigres se impusieron por 3
goles contra 1 a los Rayados de Monterrey en el Estadio Universitario de Nuevo
León.
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