El Espanyol dispuso
una estrategia defensiva en busca de aguantar los embates Merengues pero una
jugada un tanto fortuita arruinó la estrategia y si bien evitó la goleada,
terminaron cayendo en su propia casa por la mínima diferencia ante un Real
Madrid que no se guardó nada y dispuso de sus titulares para la Copa.
Todo apunta a que
Ancelotti por fin ha encontrado la formación ideal y, sobre todo, a la gente
idónea para llevar a cabo el trabajo que busca. Si bien el Real Madrid no luce,
su juego es efectivo y cada vez se ve mejor conjunción aunque ante los Periquitos
no encontró mayor resistencia en el traslado del balón y fue realmente en el
último cuarto cuando eran presionados.
Cuando corría el
25', Arbeloa mandó un centro desde la banda derecha y Bale apenas rosó el balón
con la cabeza y Benzema remató el esférico para anotar el único gol del partido
que no bajaron la intensidad de la presión y mantuvieron el asedio sobre la portería
local.
El Espanyol encontró
mejor salida en la segunda parte y niveló el partido creando buenas opciones de
gol pero sus delanteros fallaron a la hora buena y se les escapó el empate
aunque también el Real Madrid pudo haber liquidado el encuentro pero Casilla, el
arquero local, logró salvar a su equipo con buenas intervenciones.
La solvencia
defensiva madridista terminó por imponerse y el marcador ya no se movió más,
quedando la definición para la vuelta que se llevará a cabo en el Santiago
Bernabéu.
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