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sábado, 4 de enero de 2014

Santos Laguna 1-1 Guadalajara


Las Chivas Rayadas de Guadalajara plantearon un jeroglífico difícil de interpretar para los Guerreros de Santos Laguna y lograron salir del Estadio Corona TSM con un valioso punto que seguramente afianzará la moral del chiverío.

Las Chivas se fueron al frente cuando corría el 2' gracias a una jugada un tanto fortuita. Carlos Fierro desbordó por la banda derecha y mandó un centro al área que la defensa no supo despejar y después de un par de rebotes, el balón cayó a los pies de Omar Bravo y este mandó un fuerte zapatazo que terminó incrustándose en el ángulo superior izquierdo de la portería defendida por Oswaldo Sánchez para el 0-1.

Santos Laguna no dudó en lanzarse hacia el frente y buscó insistentemente la portería rival pero en esta ocasión las Chivas se plantaron bien y en todo momento mostraron un gran orden táctico que les permitió defender atinadamente su marco sin dejar de buscar la portería rival.

Santos controló más tiempo el balón y nunca dejó de buscar la portería visitante pero el gran trabajo defensivo de las Chivas hizo que el conjunto local no pudiera traducir ese dominio en jugadas de gol. Guadalajara supo aguantar las andanadas de los laguneros y aun así darse tiempo para lanzar peligrosos contragolpes.

Santos Laguna tuvo el empate en la recta final de la primera parte pero el remate de Oribe Peralta se estrelló en el poste y el contra remate de Javier Orozco fue atinadamente desviado a tiro de esquina por Israel Castro.

Marco Fierro parecía escaparse en un rápido contragolpe cuando arrancaba la segunda parte pero fue detenido por Alanís y el árbitro no dudó en sacar la tarjeta amarilla. Un descuido que pudo haber salido muy caro.

Los de la Laguna consiguieron el empate al 50' gracias a una bonita jugada. Javier Abella desbordó por la banda derecha y mandó un centro al área que fue bien rematado con la derecha por Darwin Quintero para el 1-1.

Pese al empate, Santos Laguna mantuvo la actitud ofensiva y vivió sus mejores momentos obligando a las Chivas a replegarse para no verse rebasados. Sin embargo, el Rebaño no se limitó a aguantar sino que esperó con paciencia su oportunidad para lanzar contragolpes y en uno de estos, cuando corría el 66', Alanís tuvo que sujetar a Aldo De Nigris para evitar que se escapara con ventaja y el árbitro le volvió a sacar la amarilla por lo que tuvo que abandonar el terreno de juego dejando a su equipo en inferioridad numérica.

Los visitantes no dudaron en buscar su oportunidad y adelantaron filas en la parte final del encuentro, aprovechando el desconcierto lagunero y generando sus mejores opciones pero el marcador ya no se movió más y el partido terminó empatado a 1.

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