El Espanyol de
Barcelona está metido en el ojo del huracán. Ha conquistado 9 puntos después de
13 jornadas. De estos 9 puntos, 5 han sido ganados en casa gracias a 1 victoria
y 2 empates y 4 fuera con 1 victoria y 1 empate. De sus 8 derrotas, 4 han sido en
casa y 4 fuera.
Dados los magros
números, la directiva ha optado por darle las gracias a Mauricio Pochetino
quien asumió el cargo hace 4 años en una situación mucho más dramática que la
actual. Si bien hoy el Espanyol está sumido en el sótano, la distancia con
respecto al Deportivo La Coruña, que representa la salvación, es de tan sólo 2
puntos.
Los Periquitos
tienen 9 unidades y por encima de ellos están Osasuna con 10, Granada y
Deportivo con 11, Mallorca con 12, Celta de Vigo con 14 y Athletic de Bilbao y
Real Zaragoza con 15. Es decir, con una diferencia de 6 puntos se encuentran 8
equipos que son los que en realidad están peleando por no descender.
El Espanyol busca la
salvación y para esto ha puesto los ojos en Javier Aguirre quien, según medios
españoles, ayer por la madrugada habría llegado a un acuerdo con la directiva
para tomar el timón del equipo y hoy se llevará a cabo la firma del contrato.
El Vasco Aguirre
sabe muy bien lo que es pelear por no descender en España. Así tomó en su
momento al Osasuna de Pamplona y no sólo lo salvó del descenso sino que en
pocos años lo llevó a pelear por los puestos de Europa. Su buen trabajo en
Pamplona lo llevó al Atlético de Madrid donde no las tuvo todas consigo y fue
destituido tal vez demasiado pronto para volver a tomar los riesgos y asumir la
responsabilidad con Real Zaragoza cuando también tenía serios problemas de
descenso y a quienes salvó en su momento para ser destituido un año después.
Aguirre es un
profesional y siempre se ha distinguido por su trabajo serio y constante. Es un
tipo acostumbrado a rendir buenos frutos para los equipos con los que se ha
desempeñado y bien puede ayudar al Espanyol en esta crisis antes de que se haga
demasiado profunda.
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