Cruz Azul se
comportó como un equipo sólido, solvente y con oficio para frenar a la poderosa
ofensiva de los Esmeraldas de León. Sin embargo, la Máquina, tuvo para matar y
perdonó por lo que el duelo aún no se ha definido.
Como se esperaba,
León se presentó al Estadio Azul buscando ofender aunque en esta ocasión no
pudo sorprender a los Cementeros cuya defensa se comportó a la altura de las
circunstancias y, cuando fue superada, Corona se vio en plan grande.
Guillermo Vázquez
estudió bien al rival y buscó abrir el campo con jugadas a velocidad para
aprovechar la poca movilidad de los zagueros Esmeraldas, lo que provocó que
Cruz Azul tuviera una buena cantidad de jugadas a balón parado para generar
peligro y fue precisamente en una de estas cuando logró irse al frente en el
partido.
Cuando corría el
minuto 16, Gerardo Flores logró adelantarse a su marca en un tiro de esquina
para anotar, de cabeza, el primer gol del partido y poner al frente a Cruz Azul
1-0. La anotación desestabilizó a los visitantes que vivieron a partir de ahí
momentos apremiantes.
Un par de minutos
más tarde, el árbitro marcó una pena máxima en contra de los Esmeraldas pero
lamentablemente para los seguidores celestes, el disparo de Chaco Giménez fue
bien rechazado por el portero Esmeralda.
Cruz Azul se adueñó
del partido y León optó por brincar líneas para evitar la contención celeste
que había frenado sus avances y el show de Burbano y Loboa comenzó a rendir
frutos. Sin embargo, en esos momentos difíciles fue cuando comenzó a brillar
Corona, salvando a la Máquina de un par de disparos que llevaban etiqueta de
gol en el primer tiempo.
León consiguió el
gol del empate cuando corría el minuto 56 gracias a una gran jugada entre
Burbano y Maz que terminó convirtiendo en gol este último para poner el partido
1-1 pero para su desgracia, la respuesta de la Máquina fue casi inmediata y un
par de minutos más tarde, Pavone aprovechó un gran pase de Aquino para
convertir el 2-1 a favor de Cruz Azul. Aquino había recibido el balón en un
claro fuera de lugar pero el árbitro no lo marcó y dejó continuar la jugada.
Si bien ambos
equipos se mantuvieron en pie de guerra y nadie renunció al ataque, ya no hubo
para más y los porteros y en alguna ocasión los postes, impidieron la caída de
más goles.
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