Las Chivas Rayadas
del Guadalajara obtuvieron una importante victoria por 3-1 sobre el América y
se meten de lleno a la pelea por los puestos de Liguilla. Durante la semana se
había estado calentando el clásico con declaraciones de ambos bandos y el público
respondió en buen número: unas 90,000 almas se retrataron en las taquillas del
Azteca.
Las Águilas
arrancaron mejor, tomaron el balón y fueron al frente aprovechando serios
titubeos de la defensiva jalisciense que parecía muy nerviosa en el inicio. Sin
embargo, la falta de profundidad americanista no podía faltar en un partido
como este y los azulcremas no capitalizaron las ventajas ni el dominio.
Cuando mejor jugaba
el América, las Chivas comenzaron a despertar y Marco Fabián mandó el primer
aviso sobre la portería defendida por Hugo González pero el arquero
americanista se aplicó y desvió el balón a tiro de esquina.
La suerte estaba
echada, el América presionaría buscando conectar con Chucho Benítez en el eje
del ataque y las Chivas responderían con contragolpes por las bandas. El
América buscó asediar la portería defendida por Luis Michel pero no tuvo mucho
éxito y fue el Guadalajara quien asestó el primer golpe.
En una jugada por la
banda izquierda cuando corría el minuto 35, Chatón Enríquez peleó con Mosquera
y el balón terminó siendo peinado hacia el segundo poste donde Marco Fabián
apareció solo y sin marca para anotar de cabeza el 1-0 que ponía adelante a las
Chivas Rayadas del Guadalajara.
La respuesta
americanista no se hizo esperar y cuando corría el minuto 40, Juan Carlos
Medina anotó de buena forma el 1-1 que nivelaba de nuevo las acciones.
Para la segunda
parte, Chivas salió mejor y se quitó el dominio americanista. Ahora eran los
azulcremas los que buscaban responder al contraataque porque las Chivas no les
prestaban el balón. Sin embargo, tal y como había sucedido en la primera parte
con el América, el Guadalajara tampoco podía plasmar en el marcador su dominio
ya que caría de profundidad y sus mejores aproximaciones eran centros al área o
disparos de media y larga distancia.
Fue precisamente en
un intento de larga distancia cuando las Chivas se reencontraron con el gol.
Cuando corría el minuto 59, Rafael Márquez mandó un disparo potente que buscaba
la portería americanista desde los 3/4 de cancha pero para su buena fortuna, Diego
Reyes desvió el esférico y dejó sin oportunidad a Hugo González. El árbitro
apuntó autogol para el zaguero americanista pero Rafael Márquez lo celebró como
suyo. Las Chivas se habían ido al frente de nuevo, 2-1.
El América no
encontraba el camino. Sus avances eran atropellados y no lograba crear
ocasiones de peligro. El Rebaño sabía que tenía a un equipo herido y no lo
desaprovechó. Cuando corría el minuto 67, Rafael Márquez volvió a dar muestras
del por qué lo contrataron como refuerzo y al ver ligeramente adelantado al
arquero americanista no dudó en mandar un disparo bombeado que terminó
incrustándose casi en el centro de la portería azulcrema para el 3-1 que
amarraba el partido para las Chivas y daba a Van't Schip su primer clásico.
El América intentó
reaccionar pero sus embates fueron repelidos por las Chivas. Michel se empleó a
fondo y en una ocasión Héctor Reynoso salvó su arco cuando su arquero estaba
vencido. El Rebaño se multiplicó en defensa y sofocó los intentos americanistas
hasta que el árbitro dio por concluido el encuentro. Gran triunfo de las
Chivas.
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