La selección
mexicana culminó esta fase preclasificatoria con su sexta victoria, esta vez
por 2-0 ante El Salvador en el Territorio Santos Modelo de Torreón, Coahuila
ante una buena entrada. Si bien el conjunto tricolor mejoró con respecto de su
partido anterior, el desempeño también fue pobre y tuvo que pasar más de una
hora para que los mexicanos abrieran el marcador.
El paso perfecto de
la selección mexicana oculta su mal funcionamiento. Si bien los tricolores
generaron muchas opciones de peligro, también se cansaron de fallarlas y el
partido bien pudo haber tomado otro derrotero si su rival en turno hubiera
sabido aprovechar esto.
El gol no sólo tardó
más de una hora en caer, sino que vino de un rebote, lo cual habla de la
incapacidad para concretar del equipo mexicano. Esta vez el Chepo utilizó una
alineación alternativa y utilizó en la portería a Talavera, Huiqui y Rodríguez
en la central, Aldrete y Meza en las laterales, Henríquez y Peña en la
contención, Guardado y Reyna como volantes y De Nigris y Peralta en la
delantera.
Cuando ya corría el
minuto 63, Oribe Peralta empujó con furia un balón rebotado por Portillo, el
arquero salvadoreño, a un disparo de Reyna y anotó el primer gol del partido
cuando ya la presión del público era fuerte. Unos minutos antes, José Manuel de
la Torre había ingresado al Chicharito en lugar de De Nigris quien no tuvo una
buena noche y recibió mucha presión del público.
El segundo gol cayó
cuando corría el minuto 85 y fue obra de Javier Chicharito Hernández a pase de
Elías Hernández.
Así las cosas, entre
las muchas fallas mexicanas y la buena actuación del portero salvadoreño, el
marcador ya no se movió de nuevo y el partido terminó 2-0 sellando el
"paso perfecto" de México y la eliminación de El Salvador para el
Hexagonal final de la CONCACAF.
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