La Liga de Campeones de Europa, mejor conocida como la Champions, enfrentará esta semana a 4 grandes equipos en semifinales. Por un lado, el Real Madrid español tendrá que vérselas con el Bayern de Múnich alemán y por el otro, el Barcelona de España se enfrentará al Chelsea de Inglaterra.
4 grandes equipos con un historial increíble que tendrán que eliminarse entre sí en dos semifinales que prometen sacar chispas en los 4 escenarios.
Mourinho, entrenador del Real Madrid, ha tomado el compromiso con la seriedad que corresponde y ha convocado a toda la plantilla de 23 jugadores más un portero de la filial, 24 en total, para viajar a Múnich y enfrentar al Bayern este martes. Los merengues ya han realizado su última práctica en Valdebebas y hoy mismo viajarán a Alemania. Para variar y no perder la costumbre, el entrenador portugués ha controlado la sesión permitiendo únicamente 15 minutos para los medios de comunicación y en esos 15 minutos sólo se ha hecho algo de calentamiento y no se han dado pistas sobre el planteamiento o la alineación.
El Bayern por su parte también está haciendo su tarea. Por lo pronto, el Allianz Arena lucirá un lleno espectacular como es costumbre ya que, según los datos proporcionados por el propio Bayern, el estadio se ha llenado en todos los partidos que el equipo ha sostenido en los tres últimos años. Mario Gómez ha adelantado que "el Allianz va a arder el martes" y nadie tiene la menor duda.
La motivación de estar en su estadio frente a un rival histórico y de que la final tendrá lugar en el mismo escenario hace a los alemanes extremadamente peligrosos y pocos equipos son capaces de crecerse tanto como el Bayern que se ha distinguido a través de su historia como uno de los grandes de Europa.
Por su parte, el Barcelona llega al enfrentamiento con el Chelsea también muy motivado ya que ha recuperado la alegría de jugar al futbol y en la Liga BBVA se pueden notar los resultados. Si bien no marchan en primer lugar de su competencia local como en otros años, sí están en óptimas condiciones y sus números son impresionantes. El hoy del Barcelona con Guardiola supera en cifras al ayer del Dream Team de Cruyff y apunta a consolidarse como un equipo de época, de esos que terminan convertidos en leyenda.
En frente tendrán al Chelsea, un equipo que tiene un pasado reciente cubierto de gloria cuando estuvo en el banquillo Mourinho y que si bien ha tenido muchas dificultades en lo que va del año que le llevaron incluso a destituir a su técnico André Villas-Boas, ha logrado reencontrarse bajo la tutela de Roberto Di Matteo y ha vuelto a las bases para recuperar su mejor forma.
Tanto en el Chelsea como en el Bayern hay voces que gritan que se puede lograr la hazaña y se puede vencer al rival. Terry, capitán y líder del Chelsea ha dicho que "el Barcelona no es imparable pero puede destrozarte" en clara referencia a que confían en que se puede lograr un buen resultado pero que también están conscientes de que si cometen errores les puede salir muy caro.
Beckenbauer ha dicho que "el Madrid es un equipo normal, grande pero normal, donde todo es trabajado pero no tiene la espontaneidad del Barcelona".
Los 3 técnicos saben perfectamente que la prioridad en sus equipos es hoy y será siempre la Champions, por lo que están frente a frente tramando como obtener el título y como dar ese paso que les permita acceder a la gran final que este año se celebrará en Múnich, Alemania.
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