De vuelta

El Levante ha dejado en claro una y otra vez que viene en serio en esta temporada y ahora ha derrotado 3-1 al Granada. Con la victoria, los levantinos se mantienen en la pelea por puestos de clasificación europea y lo hacen a su vez, con solvencia.

El Levante no es un equipo que busque la posesión del balón sino mas bien está acostumbrado a actuar al contragolpe. El equipo se ha caracterizado por saber aguantar a pie firme en la parte baja y por lanzar poderosos contragolpes que terminan aniquilando al más pintado. Es un equipo que sabe recuperar el balón y aprovecha cualquier descuido para atacar con velocidad y precisión.

Para muchos, el Levante aspiraría a lo sumo a mantenerse vivo en la Liga BBVA pero desde un inicio, el equipo se ha mantenido peleando puestos de clasificación europea y ahora no se conforma con la Europa League y apunta presionando con fuerza para un boleto de Champions.

El primer tiempo terminó empatado a ceros pero apenas entraron a la segunda parte y el Levante puso de manifiesto sus malas intensiones. El 1-0 cayó cuando corría el minuto 46 por conducto de Koné quien cabeceó un centro de Valdo, pero Granada logró el empate al minuto 67 por conducto de Ighalo.

Xavi Torres volvió a poner al frente al Levante cuando corría el minuto 73 y al 85, Valdo puso el 3-1 definitivo que le dio el triunfo al Levante.

En definitiva, lo peor que se puede hacer con este Levante es darle espacios ya que su bien afilado contragolpe es capaz de surcar el campo de forma vertiginosa y tomar por sorpresa a la defensa contraria como hoy ha sucedido con el Granada que terminó pagando las consecuencias de su osadía.